Reino Unido está viviendo actualmente un intenso debate sobre el futuro de la BBC. En pleno proceso de renovación de su norma constitutiva, la Royal Charter, que caduca el 31 de diciembre de 2016, surgen voces que cuestionan el papel del sistema público de radiotelevisión en un mundo cada vez más globalizado.
Cada revisión de la Royal Charter (aproximadamente cada diez años) supone una oportunidad para debatir públicamente sobre el futuro de la BBC. En esta ocasión, ante los numerosos escándalos y problemas que han sacudido al operador británico (caso Savile, elevados sueldos de los ejecutivos, fracaso de la Digital Media Initiative, dimisión del presidente del Consejo de Administración de la BBC, recortes, despidos de personal, reducción de servicios) esta revisión se muestra más profunda. La propia Corporación ha propuesto su visión estratégica en el discurso de su director general, Lord Hall, y en una serie de informes. Asimismo, la Comisión Parlamentaria de Cultura, Medios y Deportes también ha presentado su propuesta de reforma en el Informe sobre el Futuro de la BBC (2015) y una consulta sobre si la BBC debería centrarse en suministrar programas y servicios para todas las audiencias o centrarse más en una audiencia determinada (Green Paper).
En cuanto al futuro de la información, la BBC ha elaborado un informe, The Future of News (2015) en el que realiza un amplio análisis del impacto de internet en el periodismo. Las principales conclusiones del informe son que:
- la BBC es más necesaria que nunca en la era digital: la misión de BBC News (informar) es más apasionante y necesaria que nunca. Más apasionante porque internet ha mejorado la forma en la que el servicio público de radiotelevisión mantiene informado a todo el mundo. Y más necesaria porque internet por sí solo no puede cumplir con la misión democrática de informar. La tarea de la BBC ha de ser suministrar información que sea precisa y equilibrada, profunda e independiente;
- valores periodísticos: la BBC debe mantener los altos niveles de confianza del público en su periodismo (preciso, imparcial, con diversidad de opiniones, equilibrado y de servicio público);
- calidad vs. cantidad: internet ha hecho que la información esté más disponible, pero al mismo tiempo se ha convertido en un canal de desinformación, polarización y desinterés, lo que hace que una fuente de información reconocible, fiable e imparcial sea cada vez más importante. Y las audiencias valorarán el periodismo que explica, investiga y exige responsabilidades;
- transparencia: la era digital va a requerir a BBC News ser más abierta. Será necesario proveer acceso al contenido informativo a través de otras plataformas y abrirse a la participación activa de las audiencias;
- universalidad: es necesario reinventar los servicios para mantener a todo el mundo informado, para hacer que las personas encuentren la información. Se ha de informar a la ciudadanía de lo que realmente es importante para su día a día;
- independencia: BBC News ha de ser, y debe ser vista, independiente.
Todo ello llevará a que en la próxima década BBC News tenga que adoptar unas cuantas decisiones estratégicas:
- trabajar en la elaboración de productos digitales que ofrezcan noticias más personalizadas y basadas en la ubicación de las audiencias (por ejemplo, BBC Weather app que automáticamente encuentra la ubicación de la persona y proporciona una actualización del tiempo dondequiera que se encuentre), desarrollar dispositivos online que mejoren la compresión de las noticias; crear formas de atraer a las audiencias hacia la cobertura de la BBC, y liderar la innovación en periodismo de datos;
- ir más allá del servicio de radiotelevisión. La BBC necesita pensar en cómo seguir ejerciendo su misión de informar más allá de la radiotelevisión. En los próximos años la mayor parte de la ciudadanía accederá al contenido informativo a través de internet. Pero internet no sólo significa proporcionar noticias en una plataforma diferente, también cambia la forma en que las personas obtienen las noticias, lo que esperan de la información y lo que quieren de la BBC. Esto forzará a la BBC a repensar su distribución de recursos, acelerando su inversión en servicios digitales de noticias;
- nuevo periodismo: el periodismo de datos ofrecerá nuevas formas de exigir responsabilidades a instituciones, organizaciones y a la clase política, mientras que la personalización ofrecerá nuevas posibilidades para suministrar a la ciudadanía la información que le resulta relevante. Los servicios personalizados de información irán más allá de agregar noticias para adaptarse a las preferencias de las personas. Una personalización real significará una nueva forma de aproximarse a la presentación de la información y a la edición. En relación a este aspecto, la BBC ha desarrollado un proyecto estratégico, MyBBC, un sistema de personalización de contenidos y servicios basado en el tratamiento de datos;
- BBC como servicio global: la competencia como servicio global no sólo viene de organizaciones como Al Jazeera o la CNN, también viene de plataformas digitales como Facebook, Google y Twitter. Se hace necesario un servicio BBC World en inglés y en los idiomas de las diferentes audiencias alrededor del mundo que provea información independiente y confiable a las personas. Y con los periodistas en el lugar de los hechos;
- BBC como servicio local: existe una necesidad de mejorar la información local, la que más ha sufrido con la llegada de internet. La BBC tiene que servir a sus audiencias locales, suministrando la información que necesitan y manteniendo un control sobre aquellos que actúan en el poder local, en las regiones y en las naciones del Reino Unido.
La BBC ha de reafirmar su papel de referencia en un nuevo ecosistema mediático en el que puede llegar a ser más necesaria que nunca para distinguir la información del ruido. Para ello ha de seguir apostando por una información de calidad (noticias de trascendencia pública, documentadas, investigadas y explicadas) pero contada utilizando nuevas narrativas, soportes y formatos. En definitiva, la BBC deberá reinventarse para seguir siendo un referente en un mundo globalizado.
Autora: Nuria Fernández.